¿POR QUÉ MADERA?
Es renovable. Al utilizar madera se consigue reducir y/o evitar el consumo de materiales no renovables. Esto es especialmente importante en la construcción, donde se utilizan grandes cantidades de material y donde, en comparación, es sencillo sustituir otros materiales por la madera.
Su producción es más limpia y eficiente. La extracción y manufactura de la madera consume menos energía que la elaboración de otros materiales.
Buen desempeño antisísmico. Las soluciones constructivas basadas en madera pueden presentar un desempeño similar o incluso superior al de otros materiales frente a un movimiento telúrico. Considerando que las fuerzas en un sismo son proporcionales al peso de las estructuras que las reciben, las construcciones basadas en madera (entre 6 y 9 veces más livianas que las de albañilería u hormigón) están expuestas a impactos menores que otras de materiales más pesados.
Resistencia al fuego. Comúnmente se piensa que la madera es más vulnerable al fuego que otros materiales. Sin embargo, en un incendio, la madera se carboniza de manera uniforme a una velocidad aproximada de 1 mm por minuto, por lo que se puede predecir con exactitud su resistencia a la carga y su propensión al derrumbe. Esto supone una gran ayuda para las labores de los servicios de rescate, entre otros. Todos los materiales sufren algún grado de daño cuando son expuestos a altas temperaturas. En el caso de la madera, sus propiedades aislantes la dotan de cierta resistencia al fuego hasta los 250°C. Alrededor de los 300°C empieza a carbonizarse superficialmente. Esta capa de carbón frena poco a poco la propagación de las llamas al corazón de la pieza y así forma una pantalla protectora natural apreciable para la protección de la obra.
Propiedades acústicas. La madera conduce el sonido de mejor manera en sentido longitudinal a la veta que en perpendicular. Una estructura de madera densa refleja el sonido, por lo que se puede integrar fácilmente en superficies que canalicen las reflexiones de sonido. Esta propiedad es de utilidad, por ejemplo, en instrumentos musicales y salas de conciertos.
Aislante térmico. Debido a su porosidad, la madera posee una baja conductividad térmica, lo que la convierte en un excelente aislante.
Fuente: https://www.woodproducts.fi/